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miércoles, 24 de enero de 2018

Omar Arán Trío - La música de Francisco Téllez vol. 1

Artista: Omar Arán Trío
Álbum: La música de Francisco Téllez vol. 1
Año: 2000
Género: Jazz
País: México
Fuente de análisis: CD original (2000), Omar Arán / Conaculta

Lista de canciones:

1. Swinging
2. Moe
3. Buscando el Swing
4. Rodando
5. Boppers de la calle
6. Murmurando un canto
7. Diagonales
8. Dionea
9. Klook
10. Petición
11. Status blue
12. Buscando el Swing (alt take)

Interpretes:
Ken Basman - Guitarra
Jorge "Luri" Molina - Bajo
Omar Arán - Batería


Sobre el disco:

Este es un disco tranquilo, timbres suaves, desarrollos inteligentes, simplemente un poco de buen jazz, no sólo de rock viven las y los… seres humanos. Bajo, batería y guitarra es el trío Omar Arán, material producido por Omar Arán y Fonca, no es ese material producido por la gran industria musical o las pequeñas productoras que también hacen su pequeño negocio, éste es de esos discos que más bien se hacen por eso que cada día muchos "músicos van olvidando", por la pasión de crear música, de saber el oficio, de no poder detener la capacidad de crear.


Tal vez a algunos no les guste mucho la música de jazz, pues el mundo sonoro inevitablemente presente en la modernidad, se ha convertido en su mayoría como la cultura, la moral y la ética en una mercancía, también los músicos con un poco de talento o un mucho, entraron al mundo en el que de lo que se trata es de venderse al mayor precio posible y proporcional a su ambición y deseo de ser alguien, ese alguien que por unos discos o unas composiciones tengan el éxito merecido y ganen cantidades insultantes por su trabajo. Terminar como el inolvidable Michael Jackson con una casita con costo nada menos que de 100 millones de dólares, o la herencia que dejó el revolucionario y gran luchador por la paz, John Lennon de 800 millones de dólares y etc. de grandes músicos e ídolos de la “humanidad“ esas son las grandes super estrellas. Pero también hay otros mundos en la música, menos espectaculares, menos ostentosos, y tanto o más creativos, sólo que el medio en que nos desarrollamos, nos va normando inevitablemente nuestro gusto musical, y muchas veces nos han domesticado para apreciar o desdeñar algún género musical y creer que eso es lo que vale y así conformamos nuestra cultura, y eso que algunos llaman arte. 

Y en uno de esos pequeños mundos, y tal vez no tan pequeño, es en el que habita un personaje, conocido y muy apreciado en el mundo del jazz mexicano y ahora con sus 73 años está retirado de la docencia pero no de la música. Por 50 años ha sido el dirigente del Cuarteto Mexicano de Jazz, a los 23 años cuando terminó sus estudios en el conservatorio de música, comenzó a poner los cimientos para lo que en 1980 sería la primera licenciatura de jazz en México, esto fue en la escuela superior de música.

Él fue mi maestro, entré a estudiar en la segunda generación de la carrera de jazz de la ESM y me encontré con un maestro en el sentido estricto de la palabra (jeje), pues daba todas las clases, no había profesores que enseñaran jazz. En México ya existían algunos músicos que lo tocaban, pocos eran ampliamente conocidos, pero quien tuviera sistematizado y planeando para enseñar a jóvenes que querían aprender profesionalmente como tocar jazz, no había, y el daba todas las clases, peleaba con la administración de la escuela que tenía una formación clásica y absolutamente cuadrada de entender la música y el método educativo, digamos un 2/2 inamovible. 

No es una persona agresiva, pero sí tenía un obstinato muy firme para conseguir que los alumnos tuviéramos chance de tener acceso a la posibilidad de aprender música desde el punto de vista del jazz, y poco a poco fue creando, eso, una escuela, éramos 20 o 30 gatos y poco a poco fue creciendo. Muchos aprendimos y entendimos el proceso de crear música en grupo y en el instante, eso que llaman improvisar, se crearon orquestas con todos los formatos imaginables y nos enseño la pasión por hacer música tan compleja como quisiéramos o pudiéramos, y es de esas pocas personas con mente abierta y que te enseñaba a hacer música con mente abierta, hoy día sin dudarlo, la mayoría de los buenos músicos de jazz en México de entre los 20 y los 40 años, algo le deben a Téllez. Siempre se ha negado a grabar discos pues dice que el jazz es la musical del momento, es radicalmente diferente ir a un lugar a escuchar a los músicos tocar jazz e improvisar, que oírlo en discos, aunque para resguardar ese género para la historia es necesario grabarlos si no, no hubiéramos tenido la oportunidad de escuchar a Charlie Parker o a uno de los músicos más impactantes desde mi punto de vista, John Coltrane. Se organizó un homenaje a su carrera y trayectoria del maestro Francisco, a lo que él lo convirtió en un concierto y una de las obras que tocó fue el “Love supreme” de Coltrane, disco que posiblemente muchos no conozcan y que Francisco dice que casi nadie lo toca y es una de las obras importantes en la historia del jazz; y lo tocó a sus 70 y tantos años en algo que quiso ser su homenaje y terminó en un buen concierto con el cuarteto mexicano de jazz y la Téllez Jazz Band.

"EL JAZZ ES COMO LOS PLÁTANOS SE TIENEN QUE COMER EN EL LUGAR DE ORIGEN"
Francisco Téllez

- Algo más sobre el tema:

Francisco Téllez, maestro de maestros del jazz mexicano, pionero de la profesionalización del jazz en México, el pianista Francisco Téllez rinde tributo al género. "Ir con las autoridades que tienen la cabeza chueca y hacerles ver que el jazz tiene una importancia es un trabajo de lucha y de locura", dice en entrevista. Cuando era estudiante, tocar blues y jazz en las aulas del Conservatorio Nacional de Música estaba vetado. “Los cubículos eran más chiquitos, había un piano de cada lado y si pasaba el prefecto y alguien estaba tocando una pieza popular, le quitaban el lugar de estudio”, relata Francisco Téllez.

Al día siguiente de su graduación conservatoriana como concertista, el joven acudió a una cita en la Escuela Superior de Música que habría de definir su camino profesional. Un tranvía incendiado a media cuadra del edificio era la señal de los tiempos revolucionarios que corrían. Era 1968.

Recién graduado, al pianista le interesaba el movimiento estudiantil, estimulado por sus lecturas de Julio Cortázar acerca de la revuelta parisina y por los acontecimientos locales. Quizá ese espíritu tuvo que ver con su propia revolución académica.

En la Superior de Música, Téllez trabajó por más de 30 años hasta que se jubiló, en 2009, por motivos familiares. Aunque, dice, él hubiera querido seguir dando clases. Comenzó el mismo día que lo citó el director, su tío, el también pianista Rodolfo Téllez Oropeza. “Me mostró las instalaciones hasta llegar al tercer piso. Abrió una puerta y me dijo: ‘estos son tus alumnos’”, recuerda.

Poco más de una década después, el maestro revolucionaba la enseñanza musical de este país al crear la primera Licenciatura en Jazz, en la Superior de Música, en 1980. 

Hasta ese momento, su trabajo a favor del género en México fue un camino trazado a contracorriente. En entrevista, recuerda cómo él y otros grandes músicos de su tiempo debieron adentrarse en el género de forma autodidacta.

“Tuve compañeros a los que les gustaba el jazz y buscábamos la forma de tocarlo a escondidas”. En el Conservatorio compartió aula con Enrique Nery y Juan José Calatayud, además de estudiar análisis musical junto a otros alumnos de la generación del 59, como Eduardo Mata, Fernando Lozano y Héctor Quintanar.

Indagar sobre los antecedentes del jazz era algo sumamente difícil en una época en la que no llegaban libros o discos del exterior, pero también lo fue poner en práctica ese conocimiento con la serie de detractores que, afirma, encontró tanto en el ámbito jazzístico como en el clásico. Así formó el Cuarteto Mexicano de Jazz, en 1974.

Poco antes, a mediados de 1970, había creado el taller de jazz, antecedente de la carrera en la Superior, con el fin de atraer a los estudiantes que empezaban a desertar. El saxofonista Miguel Samperio, Pancho López en el contrabajo, Héctor Infanzón en el piano y Juan Valdivia en la batería, figuraban entre los primeros alumnos que presentaron su trabajo final en el Palacio de Bellas Artes, pues el auditorio de la nueva sede de la escuela en Coyoacán aún no estaba listo.

Téllez impartía todas las clases, pero el incremento de los participantes le obligó a contratar maestros para cada instrumento, entre ellos Enrique Valadez y Poncho Martínez. Otros talleres, como el de ópera, el de grafía musical o de música mexicana, desaparecieron, y un cambio en la dirección -hasta entonces a cargo de Francisco Núñez Montes- también pretendía cerrar el taller de jazz.

“Eran pleitos contra todo, desde pelear una plaza para los maestros hasta organizar el aspecto académico. Ir con las autoridades que tienen la cabeza chueca y hacerles ver que el jazz tiene una importancia es un trabajo de lucha y de locura, tenacidad, hasta lograrlo”, destaca homenaje a la modesta

En una de sus primeras actuaciones en el Auditorio Silvestre Revueltas de la Escuela Nacional de Música, el cuarteto compartió escenario con el pintor y escultor Jazzamoart. “Eso me lo recordó recientemente Héctor Infanzón, que fue mi alumno y me dice que él estuvo ahí, me vio tocar y lo vio pintar”. 

“Tengo muchas composiciones, hasta pena me da. Cada libro tiene 220 piezas y hay uno por cada letra del abecedario. Los hice para aprender a escribir, no es que quiera tener muchas piezas. Hay unas muy buenas, otras muy malas, depende del estado de ánimo y siempre las respeto como quedan, porque es la forma como me sentía en el momento”, comparte.

Hasta ahora no ha hecho ninguna grabación y sólo se presenta ocasionalmente. “Admiro a muchos de mis compañeros que tienen sus discos, una carrera. Yo quise hacer una escuela y en el camino tuve que dejar otras cosas para lograrlo”.

    8 comentarios:

    1. FLAC: https://thinfi.com/1ddo

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    2. Una joya de colección este CD del 2000. Por ahi grabaron el Vol. 2 en 2001. Lamentablemente Ken Basman pasó a mejor vida el año pasado. Luri sigue en plena marcha y desconozco que hace hoy Omar. De Francisco nos entramos por la buena reseña que acompaña al CD. Muchas gracias por el aporte. Saludos.

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    3. que bien que te gusto y estaremos subiendo algunas cosas mas de musicos mexicanos de jazz
      se agradece saludos

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    4. Tecnicamente el mejor album que descargué de ti (y seguramente de todo México !). Esta musica merece totalmente esta calidad sonora. Muchas gracias Juan.

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    5. que bien que te gusto y que podamos compartir este tipo de materiales, para que no queden en el olvido, o que se mal escuchen, y trataremos de subir lo mejor que podamos conseguir
      saludos

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    6. Magnífico jazz del maestro Téllez. Gracias

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    7. ¡Muchas gracias! ( ´ ▽ ` )ノ

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