Sergio Magaña, José de Molina y Los Nakos - Del surrealismo, la picaresca y el humor

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Artista: Sergio Magaña, José de Molina y Los Nakos
Álbum: Del surrealismo, la picaresca y el humor
Año: 1981
Género: Folk, Tango, Folk rock, Norteño
País: México
Fuente de análisis: LP original (1981), Nueva Voz Latinoamericana [JS-20]

Lista de canciones:

LADO A

 1. La lúdica mujer impúdica
 2. Sueño irreversible
 3. El menú del Marquez
 4. El asesino de televisión
 5. La modista

LADO B

 6. Discurso patriótico
 7. El charro morado
 8. Pasitas
 9. El monje de minifalda
10. Canto a tus vísceras

Sobre el disco:

Lo dijo en su momento André Breton, el francés considerado como fundador del surrealismo, quien proclamó a México como "el país más surrealista del mundo" y lo respaldó Salvador Dalí al advertir: "De ninguna manera volveré a México. No soporto estar en un país más surrealista que mis pinturas". Nuestra cultura está plagada de cuestiones surrealistas, es decir, que sobrepasan lo real impulsando lo irracional y onírico, como lo que buscaba este movimiento artístico y literario. Tradiciones, costumbres, rituales, política, literatura, danzas, arte en general y por supuesto en la música se ve y escucha reflejada esta serie de fusiones, fantasías o choque de ideas que hacen tan único a este país. Y si a eso le sumamos la picaresca y el humor... qué otros términos como estos son tan fundamentales para definir nuestra idiosincrasia. En este disco sus autores pretenden explorar un poco más estos terrenos, tan transitados muchas veces de manera inconsciente, "con la intención de aportar algo en un terreno tan rico dentro de la narrativa mexicana, pero tan inexplorado en cuanto a trabajos discográficos se refiere"*.

Inicia el álbum con un magnífico corrido esdrújulo, compuesto e interpretado por José de Molina, titulado "La lúdica mujer impúdica". Un sonido de marimba presenta la melodía de la canción para luego incorporarse la guitarra acústica rasgada y el bajo que marcan el ritmo para esta divertida/trágica historia de una mujer, como tantas que a de haber por ahí, a la que tantos adjetivos tan contradictorios no la podrían describir mejor. Su vida completa está aquí para ser escuchada y ponerse a analizar cómo es que se educa a las niñas y mujeres en este país. Antes de esta versión del vinilo había tenido oportunidad de escuchar esta y otras canciones de Molina por descargas en la red. Ahí fue donde conocí por primera vez esta canción, aparentemente extraída de una edición en caset de este álbum y algo que llamó mi atención es que la música de esta versión del vinilo es distinta a la del caset. O más bien, a esta versión le hacen falta pistas de instrumentos que la otra versión sí tiene. En la versión de caset, conforme avanzamos en la historia de la vida de esta mujer, los instrumentos que llevan la melodía van cambiando. La primera etapa de su vida la representa la marimba, ya su etapa de plena juventud la representa un acordeón con el acompañamiento de una batería (ausentes ambos instrumentos en esta versión), su etapa de madurez la representa una guitarra eléctrica limpia requinteando (igual ausente aquí) y finalmente su etapa última me parece que es una melódica, que en esta versión sí se escucha. Igual me gustaría llegar a obtener una copia del caset para corroborar lo de estas versiones, ya que ese recurso del cambio de instrumentos que representan las distintas etapas de la vida de la mujer me parece simplemente genial. Y aquí en esta versión se extrañan.

Llega el turno del grupo Los Nakos con una composición de uno de sus integrantes, Ismael Colmenares, "Sueño irreversible". Está canción es quizás de lo más cercano que encontraremos en el disco que se aproxime musicalmente al rock, podríamos definirla como una balada folk rock en la que el surrealismo se aborda a través del mundo de los sueños. Buen manejo de armonías y destacada la interpretación femenina de Elia Crotte que nos canta una loca y peculiar fantasía que la invade al dormir.

Regresa de Molina a cantarnos un tango (género bastante recurrente en el disco) plagado de imágenes grotescas y nauseabundas que describen "El menú del Marquez". Créditos en la música al Trío Tango "Garufa" y simplemente espléndida la interpretación de José, pese al error no sé si voluntario o involuntario del 'bur-marquez' (incluso en lo ortográfico: marqués), algo que cada vez que la escucho siempre me da vueltas en la cabeza del por qué no se corrigió... y es que suena tan genuino y un tanto circunstancial...

De vuelta los Nakos con una composición de Sergio Magaña, a quien se le da créditos en la portada del disco, pese a que su aporte sólo es como compositor y no como interprete y al parecer ni músico en la grabación. Y para quien no lo sepa, Sergio Magaña fue un dramaturgo, crítico de teatro, columnista y escritor mexicano que cultivó diversos géneros, entre los que destacan la dramaturgia y la crítica. Y no estoy seguro, ya que en la red se encuentra muy poca información respecto al año de estas grabaciones (el disco no dice nada al respecto), pero creo que para cuando se editó este material, Sergio ya había fallecido. Volviendo al tema, "El asesino de televisión" se me hace un tanto facilón en su crítica y el humor que maneja aquí el grupo no me convence del todo. Siendo el tema más largo del disco, hace que decaiga bastante el ritmo del mismo. Hay momentos de parodia a jingles televisivos, sketches y un toque de humor negro, más tamborazos para crear ambiente caótico, pero aún así no me termina de satisfacer.

"La modista" es otra composición de Magaña interpretada por los Nakos, con Francisco Barrios "El Mastuerzo" en la voz principal. Una balada de una historia trágica de amor, pero en un tono picaresco y nuevamente con su dosis de humor negro. Mucho más lograda que la canción anterior, sin tampoco alcanzar un nivel destacado, con una melodía bastante suave y amena, casi infantil, que contrasta con ese doble sentido de su letra. Tonos que maneja perfectamente el Mastuerzo, acompañado en coros por Elia.

El lado B abre con un texto "Discurso patriótico" de dominio popular, narrado por el Llanero Solitito invitado para esta grabación por José de Molina. Un texto hecho como discurso político, con algo de la Revolución y otros temas mezclado con palabras de doble sentido o algo de albur. Material incluido en este vinilo no en la reedición en caset. Y se preguntarán, ¿quién es el Llanero Solitito? Pues de alguna manera sirva de pequeño homenaje para alguien que desde 1973 hace teatro popular y a estado presente en todos los movimientos populares en México. Fundador y vocero del grupo CLETA (Centro Libre de Experimentación Teatral y Artística). Tiene 50 años de trabajar y 70 años de vida. Y quién más que él para hablar de su posición ante la vida y ante su trabajo:

“… Llego a mis setenta años en un mundo donde el egoísmo, que muchas veces tiene su raíz en la falta de realizaciones personales, es el pan de todos los días, donde se fomenta en los seres humanos, especialmente en los jóvenes, la desilusión sobre su capacidad de emocionarse y por lo tanto de rebelarse. Donde el ser humano sólo se sentirá momentáneamente pleno con estimulantes externos, inhibiendo su capacidad de hacerlo por ellos mismos, con estimulantes humanos que tienen dentro de sí. ¿Cómo cambiar esto cuando lo que importa, aún a los mismos trabajadores es valer por el tener? Cuándo lo importante es la apariencia, la simulación, que nos permita demostrarle al otro que valemos; así escondemos nuestros olores, nuestro color, nuestros gustos, nuestros placeres y todo esto incrementa la sociedad de consumo. Estamos en un mundo donde el decir es más fuerte que el hacer, donde la mentira es habitual y la verdad, excepción. Quizá mi acierto, que no necesariamente debe de ser el acierto de otros, es que desde siempre he visto la manera de renunciar al tener, de no desear lo superfluo sino lo estricto; de no permitir que mi felicidad se supedite en tener un auto, o tener una casa o tener un título de nobleza, que actualmente son títulos de “reconocimiento” que los poderosos nos dan, donde nos certifican que valemos…”

"El charro morado" viene a reivindicar el trabajo como compositor de Sergio Magaña, con este corrido norteño cargado al surrealismo de las leyendas que abundan en las regiones rurales del país, que es de donde toma inspiración para esta esta historia. La métrica de los versos es bastante peculiar y aunado a la temática que se aborda en este género musical, hacen que la canción sobresalga particularmente. Y ni que hablar del giro cómico al final, para aquellos que siempre le hallan el lado positivo a las cosas, más la interpretación de José de Molina, el indicado para hacerla lucir al máximo, con el acompañamiento del grupo Los Embajadores del Norte.

Y ahora sí, de lleno en el surrealismo, regresamos al tango del Trío "Garufa", con Molina quien compone la letra junto a Rogelio Mitra (quien ha sido actor, director de escena para teatro y televisión, escenógrafo y Jefe de Reparto en Televisión Educativa) de la destacada canción "Pasitas". Una letra plagada de contradicciones lógicas que recuerdan recursos como el oxímoron o la antítesis, para relatar este paseo surrealista con imágenes imposibles que pudieran ser sacadas de un sueño o una pesadilla. Pero la misma letra oculta en sí lo que ha dado origen a todas estas imágenes, algo de lo que no me hubiera percatado de no ser por los certeros análisis del amigo blogero Pingüino Elemental. Les recomiendo ampliamente visiten su análisis de esta canción para poderla apreciar a su máximo esplendor (*).

El turno de una cumbia, a guitarra de palo, bajo y batería, tocada por el grupo los Nakos. "El monje de minifalda" es una composición de José de Molina que la cede al mencionado grupo para dotarla de su estilo cómico. Sin embargo, siento que la letra es bastante floja, pese a lo osado y ácido de su crítica a la iglesia católica, prácticamente una burla a la misma. Me recuerda a otras composiciones del autor que también van dirigidas como crítica a las figuras de alto rango en la religión como lo que escribió en su disco "Salsa Roja" años antes.

"Canto a tus víceras" es una canción que se divide en dos partes, la primera siendo una pieza de dominio público, con esa mencionada picaresca que caracteriza a varias canciones en la historia musical del país. El acompañamiento lo arrancan un bandoneón (nuevamente el Trío Tango "Garufa") y una guitarra que para en un ritmo como de corrido. Ya al entrar la segunda parte la música desemboca en un tango y la canción nace de una musicalización de "Soneto de tus vísceras", poema del argentino Baldomero Fernández Moreno. Una genial adaptación que viene a refrescar la típica canción de amor, que siempre enaltece la belleza física externa de la mujer amada, para ahora honrar la belleza de los órganos internos de a quien se canta. Al final, igual tiene su giro surrealista esta canción.

Un material, como varios otros de aquellos artistas con propuestas de vanguardia, que no ha conocido re-edición. Salvo lo confuso de las ediciones en otros formatos que quitan y ponen otras canciones de otro contexto y época. Un disco que si bien no es completamente una joya, sí tiene varios momentos muy destacados pese a que se ven interrumpidos por esas otras canciones menos logradas y más simples en su forma. Vale la pena pues, para rescatar lo sobresaliente y que sirva como guía para más exploraciones sonoras y líricas de este tipo, plagadas intencionalmente de otras influencias en el arte como lo es el surrealismo.

*Extraído de las notas del disco por José de Molina.
(*) http://pinguinoelemental.blogspot.com/2011/03/pasitas.html

- Arte adicional:

 LP lado A.

LP lado B.