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miércoles, 22 de enero de 2025

Los Xochimilcas - Lo clásico de los danzones

Artista: Los Xochimilcas
Álbum: Lo clásico de los danzones
Año: 1966
Género: Danzón
País: México
Fuente de análisis: LP original (1966), Eco [No. 533]

Lista de canciones:

LADO A

1. Champotón
2. Por un cerro mejor
3. La margarita
4. Acayucan
5. La bruja

LADO B

6. Elodia
7. Dicen que los que mueren
8. La palma
9. Massacre
10. Las Mercedes de León


Sobre el disco (del libro El toque latino. El impacto de la música latinoamericana en los Estados Unidos (1979), de John Storm Roberts*):

Durante los inicios de la década de 1870 un baile de parejas llamado danzón -descendiente de la contradanza y, por tanto, pariente lejano de la habanera- se popularizó. En 1916 los danzones se tocaban al aire libre por las llamadas orquestas típicas bandas dominadas por trompeta y apoyadas por clarinete y trombón, con tambores predominando en la percusión. De una manera lírica Grenet (Emilio Grenet, musicólogo cubano) describe su sonido como un "cuadro de luminosidad amalgamada que hace aflorar a la sensualidad más remota".

Grupos conocidos como charangas francesas (orquestas francesas también llamadas sólo charangas) tocaban los mismos danzones en los interiores, con la diferencia de que los violines apoyaban a la flauta dominante y se remplaza a los tambores por timbales de menor tamaño. Para 1930 era raro encontrar orquestas típicas en Cuba. En contraste había charangas de todos tamaños.

Hacia finales de 1930 comenzó a popularizarse un nuevo tipo de banda basada en las comparsas negras carnavalescas, llamada conjunto. Estos grupos constaban de trompetas, voces y tambores conga, además de que -como los grupos iniciales de jazz en Nueva Orleans- añadieron piano y bajo cuando pasaron a los interiores.

Los conjuntos diferían de las charangas en múltiples formas. Mientras que las charangas características usaban dos voces que cantaban en armonía, flauta, violines y timbales, el conjunto de salón con frecuencia unificó un estilo de canto más africano, compuesto de dos o tres trompetas, junto con otro, más fuerte y percusivo que el desarrollo por la más delicada charanga. Era extraño, de suceder siquiera, que los conjuntos interpretaran danzones, pues se dedicaban a tocar música más negra y vehemente.

Aunque en un principio el sonido áspero del conjunto no era más popular en la sociedad educada que lo que el jazz había sido en Nueva Orléans en sus inicios, los conjuntos hicieron sentir su presencia en las charangas a través del grupo dirigido por el flautista Arcaño, a cuyo bajo, Israel "Cachao" López, se da el crédito de haber sido el introductor real del mambo al salón de baile.

"Cachao" escribió muchos arreglos de la banda e introdujo varios elementos del mambo a los danzones que compuso para Arcaño. Después de seis meses de boicot ejercido por un público airado y conservador, Arcao y Sus Maravillas alcanzaron una gran popularidad. La mezcla mambo-danzón añadió al sonido gracioso y elegante de la charanga un vaivén altamente pegajoso y original, caliente, pero ligero. Uno de los resultados fue que las charangas se adaptaron poco a poco a la africanización general de la música cubana, a diferencia de las orquestas ragtime estadounidenses, que fueron arrolladas por el jazz de Nueva Orleans. De hecho la charanga fue el origen del chachachá (un descendiente del danzón) en la década de 1950, y siguió teniendo fuerza tanto en la música cubana como en la estadounidense en el transcurso de la década de 1970.

La fecundación que la música cubana ejerció sobre la mexicana fue un proceso continuo. Un grupo de La Habanera que se presentó en la ciudad de México en 1884 dio a conocer varios números de influencia negra, y ya para al final del siglo, el danzón cubano era el baile más popular en el México urbano, aunque el ritmo anterior siguió estando de moda como "habanera de café", una versión de 2/4 lenta o moderada.

La influencia de Cuba sobre la música popular urbana de México siguió siendo muy fuerte durante el siglo XX. Como ironía, aunque Aaron Copland tituló a su tributo de 1937 a este país "El Salón México", las bandas de ese salón de moda tocaban casi en su totalidad danzones, y muchos de sus músicos -incluyendo la sección de ritmos que tocó en la noche inaugural en 1920- eran cubanos. El director de la orquesta de danzones todavía popular a mediados de la década de 1970 provenía también de la isla y todos los grupos cubanos famosos de actualidad tocan de vez en cuando en la capital del país.


*John Storm Roberts fue un etnomusicólogo, escritor y productor discográfico de origen británico y residente en Estados Unidos.

1 comentario:

  1. FLAC(LP): https://thinfi.com/0hdob
    HD(pt.1): https://thinfi.com/0hdoc
    HD(pt.2): https://thinfi.com/0hdod

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